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CHICAGO, 6 jun (Xinhua) — Se estima que unos 20.000 manifestantes participaron el sábado de la “Marcha de la Justicia de Chicago” en la ciudad con el mismo nombre para exigir justicia para George Floyd.

Los manifestantes, con carteles y ocupando unas siete cuadras, se reunieron en un parque al oeste de Chicago para expresar sus demandas.

Activistas, poetas y otros levantaron sus voces, exigiendo responsabilidad policial y el desmantelamiento del racismo sistémico.

También solicitaron la liberación inmediata de todos los manifestantes bajo custodia, así como el enjuiciamiento penal de todos los policías que maltratan a los manifestantes, informaron los medios locales.

La policía siguió la ruta de protesta mientras los manifestantes marchaban hacia un tramo de Lake Shore Drive, que se ha cerrado para facilitar la manifestación. Cuando quienes protestaban atravesaron el paso a nivel de las autopistas, los conductores en la carretera tocaron sus bocinas para mostrar su apoyo.

Todo el proceso de protesta y marcha fue pacífico. La policía informó que no ha habido arrestos ni disturbios hasta el momento.

Para evitar que se repita el caos y el saqueo del fin de semana pasado, Chicago está pagando hasta 1.2 millones de dólares a tres firmas de seguridad privadas, quienes suministran a más de 100 guardias de seguridad privados para proteger las tiendas minoristas, supermercados y farmacias locales.

Mientras tanto, la ciudad continuará haciendo cumplir el toque de queda a las 9 p.m.

Como precaución, la alcaldesa de la ciudad, Lori Elaine Lightfoot ordenó el cierre del centro de Chicago durante el fin de semana, como lo hizo el domingo después de que ocurrieran saqueos.

Todos los accesos al centro de la ciudad, incluidas las rampas de las autopistas, han sido bloqueados por camiones quitanieves; se han levantado nueve puentes situados sobre el río Chicago en el centro de la ciudad para detener la circulación entre las áreas del norte y sur del centro; la policía ha sido desplegada en casi todas las intersecciones principales, también con miembros de la Guardia Nacional de Illinois en algunos lugares; y los soldados SWAT se apostaron en las entradas de la ciudad para interrogar a quienes quisieran entrar.

George Floyd, un afroestadounidense de 46 años, murió el 25 de mayo después de que el oficial de policía de Minneapolis, Derek Chauvin, se arrodilló sobre su cuello durante casi nueve minutos hasta que dejó de respirar.

Las protestas estallaron en Minneapolis, Minnesota, al día siguiente, y se han extendido rápidamente por todo Estados Unidos.