Por CHEN JING
A finales de 2015, en el sitio web de JD Finance,
apareció un proyecto de crowdfunding titulado
“Fábrica de alimentos Axiong, refrigerios adorables”. Se trata del proyecto emprendido
por Wang Pei, un joven militante del Partido Comunista, con el objetivo de
reunir 10.000 yuanes en un mes como fondo de publicidad y promoción para la
“Fábrica de Alimentos Axiong”, una marca de Hunan.
Después de un mes de la movilización, el proyecto reunió
40.585 yuanes, alcanzando un 406 % de lo planificado. El caso fue, más bien,
una actividad publicitaria que le hizo ganar popularidad en Internet a la marca
“Fábrica de Alimentos Axiong”.
Sueño de creación de un gerente
En 2008, por
sus excelentes antecedentes académicos, Wang Pei fue exonerado de los exámenes
para ingresar a la facultad de árabe de la Universidad de Estudios Extranjeros
de Beijing. Cuando se graduó en 2012, tuvo la oportunidad de estudiar un postgrado
en la Facultad de Periodismo de la Universidad Renmin de China en Beijing, y otra
vez fue exonerado de los exámenes de ingreso. Tanto en los estudios
universitarios como en los de postgrado, Wang siempre fue buen estudiante, un
modelo en los ojos de sus profesores y compañeros de estudio. Así que, al
graduarse del postgrado, fue admitido por una famosa empresa estatal para
trabajar como gerente de comercio exterior.
Sin embargo, para sorpresa de todos, Wang Pei,
considerado por otros como un hombre de negocios con un porvenir brillante, tomó
la decisión de renunciar a su cargo, sin importar el salario alto que percibía
ni los excelentes beneficios, e incluso el registro de hukou de Beijing, para volver a su pueblo natal en Changsha,
provincia de Hunan, a emprender una start-up en Internet vendiendo los refrigerios Axiong.
Aparentemente la decisión de Wang Pei no tenía lógica.
En comparación con una vida estable, el camino del emprendimiento implica una
vida dura, llena de inestabilidad e incertidumbre. Pero Wang Pei tenía sus
razones. Antes de renunciar, se sintió inspirado por el caso de Zhang Tianyi,
un joven que pertenece a la generación nacida en la década de 1990 y es un
ejemplo de los que emprenden en Internet.
Zhang Tianyi no solo es un famoso escritor, sino
también el creador de la marca de alimentos Funiutang, que se vende en Internet.
Consiste en comida de fideos de arroz con carne de res, típica de Changde,
Hunan. En solo seis meses la marca se convirtió en una de las más
representativas de su tipo en Internet. En 2015, el premier Li Keqiang, en su
inspección a la Academia China de Ciencias y la zona de innovación de Zhongguancun
en Beijing, se enteró del caso de Zhang Tianyi, reconoció su trabajo y el de su
equipo, y les deseó un futuro prometedor.
Inspirado en la historia de Zhang
Tianyi, Wang Pei estaba
convencido de que siempre y cuando se supiera identificar adecuadamente el
mercado y el sector, el modelo de negocio de Zhang Tianyi podía imitarse.
Además, Wang pensaba que, siendo militante del Partido, debía portarse a la
altura y asumir ciertas responsabilidades sociales.
Espíritu emprendedor
Los padres de Wang Pei, que
también son hombres de negocios que han empezado desde cero, apoyan totalmente
a su hijo.
Después de su renuncia a la
empresa estatal, Wang Pei entró en una importante compañía de Internet para aprender
su funcionamiento durante unos meses. En ese período comprendió el papel
importante que desempeña “Internet +” en la sociedad actual, así como su
impacto en las industrias tradicionales. Así que poco a poco comenzó a considerar
cómo encontrar un nicho en el sector de comida tradicional utilizando el poder
de Internet.
En el proceso de emprendimiento, Wang
Pei experimentó tanto alegrías como penas. Después de renunciar a su trabajo, la
primera dificultad que tuvo que afrontar fue el cambio de chip psicológico: de un
gerente de empresa estatal pasó a ser un vendedor puerta a puerta de unos
paquetes de pescado picante y que además buscaba oportunidades comerciales en
diversas exposiciones y ferias. Incluso instalaba puestos de venta en recintos
universitarios y escolares. No solo era su propio jefe, sino también se
encargaba del diseño, la redacción, las finanzas y las ventas.
Según Wang Pei, cuando trabajaba
en la empresa estatal, solo necesitaba cumplir lo que le mandaban sus jefes. En
cambio ahora si dejaba pasar cualquier detalle, el proyecto no avanzaría. Lo
más importante es que ha entendido que todos tienen el mismo derecho a
perseguir sus sueños.
Venta en línea de productos tradicionales
Wang Pei emprendió su proyecto partiendo
del sector que más había conocido desde su niñez. Como nativo de Hunan, le
gustaban los refrigerios originales de la localidad. También sabía que el
mercado en línea aún no se había desarrollado. Por otro lado, entendía
perfectamente las características de los consumidores nacidos después de la
década de 1990, así como sus demandas y exigencias: la comida no solo tiene que
ser “sabrosa”, sino también “divertida”. A esto se suma que sus padres siempre han
trabajado en el sector de procesamiento de alimentos, lo que constituye un valioso
arsenal de conocimientos que lo respaldan. Todo esto influyó en que optara por
la venta al por menor de alimentos como su carrera empresarial.
Primero, Wang Pei diseñó un oso polar
como logo para el embalaje de la marca “Fábrica de Alimentos Axiong”, y creó un
grupo llamado “Comunidad de los osos polares” en la aplicación WeChat. Allí todos
los fans del grupo pueden opinar sobre el producto o comentar sobre cualquier tema
de actualidad. De esta manera, con la participación de los consumidores en el
proceso de fabricación, los productos no solo tienen un sabor excelente, sino también
nuevos conceptos e ideas.
El modelo de comercialización que
Wang Pei ha adoptado es de O2O, que combina a los distribuidores que tienen tiendas
reales y las ventas en línea. En la actualidad, la “Fábrica de Alimentos
Axiong” se vende en Jingdong, yhd.com, Taobao, WeChat y otras plataformas de
comercio electrónico.
Según Wang Pei, las marcas
convencionales de alimentos logran mayores ventas porque están en los grandes
centros comerciales y supermercados, y usan la imagen de celebridades en sus
campañas publicitarias. En el fondo se trata de la competencia del capital. Sin
embargo, Wang desea que sus refrigerios se expandan en el mercado gracias al
boca a boca de los mismos consumidores y la calidad del producto, y que además los
consumidores se sientan atraídos por la personalidad de la marca, así como por
la interacción con las personas que manejan la misma.
En cuanto al desarrollo futuro,
Wang Pei considera que hay que combinar el modelo tradicional del comercio
minorista de alimentos y el modelo de Internet, que es el que marcará la
tendencia futura mundial y contribuye a hacer del mundo un lugar más equitativo
donde las personas sean consideradas como lo primordial. Solo de esta manera la
producción será más transparente.
