Ecuador, que hasta hace una década era deficitario de energía y sufría apagones, se nutrirá de energía limpia y se convertirá a medio plazo en exportador, gracias a las hidroeléctricas construidas por empresas chinas.
El interés de China por financiar y construir proyectos hidroeléctricos en el país sudamericano con inversiones millonarias es fruto del impulso a la relación comercial y financiera entre ambas naciones desde 2007, según el Gobierno ecuatoriano.
La última visita oficial que realizó a China el presidente de Ecuador, Rafael Correa, en enero de 2015, contribuyó a fortalecer la cooperación política, económica, comercial, energética, educativa, científica y tecnológica.